Una conferencia en torno a temas sociales y un joven en silla de ruedas interesado en asistir. Entre la planta baja y la estancia en la que se desarrollaba el coloquio, unas escaleras que no le dio otra opción que los brazos de varias personas, que con bastante esfuerzo se las arreglaron para que las ruedas fueran salvando los escalones, en algunos momentos, a pulso. Ocurrió la semana pasada en el Ateneo, y la situación provocó que Maida Rodríguez, una de las asistentes a la cita, enrojeciera de indignación y, allí mismo, escribiera una denuncia sobre la inaccesibilidad del edificio para personas con movilidad reducida. Además, recogió cerca de 70 firmas para que sus responsables eliminen las barreras arquitectónicas: «Creo que prácticamente todo el aforo firmó», asegura.Instituciones«Esto sigue ocurriendo en muchos lugares, y en muchos edificios públicos. En el caso del Ateneo se da además la circunstancia de que hace sólo unos años se reformó todo el interior, sin tener en cuenta esta cuestión», afirma Rodríguez, que considera que tanto la Consejería de Cultura, que cedió el inmueble, como el Ayuntamiento de Málaga, que dio la licencia de obra, «deberían haber sido sensibles a esta cuestión», por lo que también elevará su queja a estas dos instituciones.Para Rodríguez, la forma en la que tuvieron que subir al joven «es indigna, y además peligrosa, porque hay que poner la silla de espaldas y él queda mirando al vacío».Por su parte, el presidente del Ateneo, Antonio Morales, reconoció que el inmueble es totalmente inaccesible para estas personas y que la gran escalera supone también un obstáculo para los mayores: «Dos arquitectos estuvieron estudiando la forma de instalar un ascensor, pero es imposible, porque además se trata de un edificio muy protegido. Nuestra máxima prioridad es instalar un salvaescaleras, en cuanto tengamos disponibilidad presupuestaria».
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
1 comentario:
Me parece increible que en los tiempos actuales todavía sucedan estas cosas. Con la de dinero que se gastan las instituciones públicas en asuntos menores y no son capaces de hacer 100% accesibles los diferentes edificios públicos. En casa dispongo de una silla subeescaleras de Servieleva y existen muchas más casas especializadas así que si algún edificio público no dispone de accesos para minusválidos...no será por falta de información!!!!!!
Publicar un comentario